Creo que esta pregunta nos la hemos hecho muchas veces, en particular cuando somos nosotros quienes generamos el modelo 3D, y todavía hay que hacer el dibujo. ¿Para que invertir más tiempo? Después de todo, ese dibujo lo hacemos con el mismo software CAD; además, “todas las personas” o equipos involucrados han recibido el modelo y sobre este, hemos tenido muchas juntas de trabajo para homologar requerimientos y necesidades. El resto del equipo, “ya sabe” cuál es la función de la pieza, ya conocen los métodos de manufactura a emplear, ya hemos acordado la manera en cómo se medirá e inspeccionara, es más, ya son conocidos un sinfín de factores que tal vez no sean tan técnicos, como plazos de entrega, país de procedencia de las materias primas, etc.…Entonces, ¿Para qué invertir más tiempo en la elaboración del dibujo técnico?
Debo de admitir que en los inicios de mi carrera como ingeniero me hice esta misma pregunta, y ahora entiendo que el origen de la pregunta provenía de mi falta de experiencia, y de mi desconocimiento del proceso de desarrollo de proyectos de ingeniería. Ahora con un poco más de experiencia al respecto, quiero compartir con ustedes la perspectiva que tengo para responder a esta pregunta.
Quiero aclarar que cuando me refiero a un dibujo técnico, me refiero a un documento técnico que detalla de manera clara y precisa la función, manufactura, ensamble e inspección de la pieza o ensamble, no solo a un lienzo con las vistas de una pieza, que está lleno de medidas, vistas, cortes y otros elementos, que sólo llenan la hoja de trabajo.

Fuente: de la imagen: https://clipartxtras.com/download/702494bee17b22e30409a883412f0ff0e6f6a1e4.html
Respondiendo a la pregunta inicial: Si; los dibujos de ingeniería o dibujos técnicos aún son necesarios, es más, bajo las normas y condiciones actuales, pueden ser obligatorios.
Pensemos en dos entornos básicos de aplicación, el entorno técnico, que tiene que ver meramente con la caracterización técnica de la pieza, que se basa en el aseguramiento de la función esperada de esta. El segundo entorno, al cual llamaremos el entorno externo o el entorno global, es ese ambiente donde participan procesos administrativos o de soporte.

Entorno técnico del Dibujo
En este entorno, hablamos de todo lo que tiene que ver con las especificaciones técnicas de la pieza, con la alienación entre el diseño del componente y su ingeniería; y que se complementa con los procesos de manufactura, ensamble e inspección. En este caso, si tenemos el rol de diseñadores o ingenieros a cargo de la pieza, debemos de pensar en quienes serán los usuarios finales de nuestra información, por ejemplo, las áreas de manufactura e inspección. Debemos de pensar que, si nuestra pieza será de producción única, seguramente la pieza se fabricará en un laboratorio o taller de manufactura, donde será más útil para el personal, contar con una impresión del dibujo, con la que fácilmente podrán consultar las características clave que deberán de controlar durante la fabricación y detallado del componente. Sin embargo, si se tratase de una pieza cuya producción será a mayor escala, lo más probable es que se utilizarán procesos automatizados (estampado, inyección, fundición, etc.), pero los procesos de inspección se realizarán en instalaciones controladas, donde será más sencillo para el equipo de metrólogos tener la información impresa para revisar “en piso” que las partes (o lote de partes) cumplan con las características de requeridas.
Entorno global de uso
No quiero decir que todas las áreas de manufactura o inspección van a tener impresiones de los dibujos y que sin ellas no podrán llevar a cabo sus tareas; lo que quiero transmitir es que debemos de pensar en las opciones y herramientas que tienen los usuarios finales de la información y adecuar esta información a esas herramientas disponibles; es ahí donde los dibujos técnicos funcionan a la perfección, pues se tratan de un “resumen” de aquello que se debe de controlar en una parte o ensamble y en términos de tiempo y costos, es mucho más sencillo recurrir a un documento impreso o digital (archivos pdf, o archivos de imagen), que tener una computadora (de características específicas) con acceso a una licencia de software CAD (aunque sea un visualizador) para abrir un modelo 3D y extraer la información desde este. Sin mencionar que, si el modelo 3D no está debidamente detallado, se corre el riesgo de cometer errores por la falta de referencias y/u homologación en la forma de extraer dicha información.
En la mayoría de las ocasiones, perdemos de vista el hecho de que cuando desarrollamos una pieza, esta forma parte de un conjunto mucho mayor de elementos, que en combinación forman el producto final. Por lo tanto, al paralelo de nuestros esfuerzos en la definición técnica de nuestro componente, existen equipos que realizan las mismas actividades con el resto de las piezas. Para coordinar estos esfuerzos paralelos, existen dentro de las organizaciones, grupos encargados únicamente de la gestión de proyectos, que se encargan no sólo del seguimiento a los avances en el desarrollo de cada pieza que forma al producto, sino que también monitorean los avances en la definición y planeación de procesos de soporte, tales como la búsqueda de proveedores que puedan fabricar piezas, empresas de logística responsables de la distribución de los componentes y productos terminados, etc. Situémonos en las actividades de búsqueda de proveedores.
Muchos OEMs (Original Equipment Manufacturer) trabajan con proveedores no sólo para la fabricación de piezas sino también para el desarrollo de algunas de las mismas. Para realizar esta actividad, los OEMs comparten información con los proveedores para realizar actividades de cotización y aunque en un principio la información del producto a desarrollar es parcial, esta debe de llevar cierto nivel de detalle para que el proveedor pueda hacer un costeo adecuado de la pieza.
Si bien el detallado de los dibujos se realizará dentro del entorno técnico descrito anteriormente, los dibujos técnicos resultantes se convertirán en el soporte al cierre de los contratos finales entre las armadoras y las compañías proveedoras. Es decir, los dibujos técnicos fungen como “contratos técnicos” en donde se encuentran bien definidos los compromisos que aceptan las partes firmantes del contrato. Manteniendo la analogía con los contratos, lo que buscará el OEM y el proveedor es tener un contrato tan especifico como posible (sin lagunas o secciones que se presten a la interpretación) y que no represente un riesgo para ninguna de las partes. Por lo tanto, los OEMs utilizan los dibujos para especificar exactamente los requerimientos y expectativas hacia los proveedores y estos por su parte, buscan definir aquellas especificaciones basándose en sus capacidades técnicas, para garantizar el cumplimiento de dichas expectativas.
Adicionalmente, los proveedores que trabajan con los OEMs, están obligados a seguir un proceso de creación y administración comúnmente llamado Sistema de Gestión de Calidad, con el cual garantizan al OEM, que tendrán un proceso estandarizado y homologado con el cual garantizarán la calidad y funcionamiento de las piezas que entregaran al OEM.
En el sector automotriz, la implementación de este Sistema de Gestión de Calidad está definido por la norma IATF 16949 y la norma VDA (según el OEM). En el caso de la norma IATF, se tiene como referencia proceso llamado Planeación Avanzada de la Calidad del Producto o APQP por sus siglas en inglés (Advanced Product Quality Planning). Este proceso esta estandarizado y es obligatorio para el desarrollo de vehículos para OEMs norteamericanos.

El proceso de APQP se define en diferentes etapas, donde están muy bien definidas las responsabilidades del OEM y el proveedor, siendo responsabilidad del proveedor la etapa del diseño y desarrollo del proceso.
Como requisito de entrada para realizar el diseño y desarrollo del proceso, se encuentran los dibujos de ingeniería y respectivas revisiones, por lo tanto, para las OEM´s (encargados del diseño de producto) y para los proveedores, es requerida la creación de estos dibujos técnicos, ya que sin ellos, no es posible el despliegue adecuado de tareas para el desarrollo del sistema de gestión de calidad.
También hay que ser conscientes de que los avances tecnológicos y condiciones medioambientales, juegan un rol determinante en la forma en cómo se gestionaran los proyectos de ingeniería en el futuro.
Conclusión
Aunque la exigencia de contar dibujos técnicos puede variar según la industria en la que nos encontremos, considero que como ingenieros debemos de seguir tomándolos en cuenta como parte de nuestros entregables, y debemos de aprovechar las herramientas con las que disponemos para hacer de estos medios de comunicación técnicas confiables dentro de las organizaciones, ya que nuestros diseños pueden ir más allá de los talleres de manufactura o laboratorios de inspección, pueden llegar hasta compañías filiales de nuestra organización o incluso a los talleres de reparación y postventa.